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Los chocolates dañinos

Desde mi Sofá | Obed Silva

Tijuana, B. C. 24 de Octubre de 2021.- Sin duda, el anuncio más importante del presidente de México en su reciente visita a Baja California fue la “legalización” de los conocidos como autos chocolates.
Para sustentar tal decisión el argumento fue que se trata de un asunto de seguridad pública pues una cantidad importante de esos vehículos se utilizan para delinquir.

Después del anuncio y como suele suceder con este tema, se vino una oleada de opiniones en contra de la decisión presidencial.

La medida adoptada fue tomada con alarma por la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) quienes en boca de su representante manifestaron que dicha determinación “contribuirá a devaluar el patrimonio de los mexicanos”.

Por su parte, la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA) se quejó diciendo que la “regularización de los vehículos usados e importados ilegalmente”, devaluará en un 20 por ciento el precio de las unidades seminuevas que ellos venden.

De acuerdo con lo consignado por el periódico El Financiero, las empresas que venden autos seminuevos manejan un mercado en México estimado en 60 mil millones de dólares anuales y por tanto resulta comprensible la airada reacción de los concesionarios de las marcas automotrices.

Por su parte, el dueño de Anapromex que administra miles de autos “amparados”, expresó que el decreto quedó corto y que seguirá pugnando por la importación definitiva de vehículos internados ilegalmente a México.
Con esa postura, dicho “líder” procura que no se le venga abajo el jugoso negocio que explota desde hace muchos años.

Así, los beneficiarios de un negocio multimillonario en dólares se aprestan a buscar cómo sacarle el mayor provecho posible a la nueva oportunidad de hincharse los bolsillos.

La apertura para la importación de autos de EEUU a México propiciada la firma del TLC trajo el fenómeno de la introducción a nuestro país de vehículos mediante “cuotas de importación” cuyos montos han sido manejados a discreción por mafias traficantes de facturas, pedimentos y falsificación del precio de cientos de miles de vehículos importados durante décadas.

Con la restricción a las cuotas de importación de vehiculos, se incentivó un mercado negro de “amparos” que produjeron millonarias ganancias en dolares a funcionarios del poder judicial federal y a coyotes.

Cuándo en el Poder Judicial Federal cortaron de tajo el otorgamiento de “amparos” para autos chocolates, se fortaleció la variante de la “protección al patrimonio familiar” ofertado por organizaciones que “amparan” a los posesionarios de los autos chocolates a cambio de módicas cuotas.

Como una hidra de mil cabezas, cuando al negocio de “los chocolates” le cortan una le nacen dos y de esta forma, por ejemplo, en los pasados gobiernos panistas se ejecutaron “programas de regularización” de autos internados ilegalmente al país contribuyendo así, al fortalecimiento de tan jugoso negocio.

Ahora, la nueva versión para regularizar los “chocolates” abrirá otro caudal de dinero para que el floreciente negocio, que parece no tener fin, siga viento en popa.

En medio de tan maloliente situación, surge una voz sensata que propone dejar de pensar con los reiterados argumentos en pro y en contra de las medidas como la anunciada por el Presidente López Obrador.

Mauricio Candiani, en un artículo del día 18 de octubre publicado en El Financiero, ofrece algunas propuestas que suenan interesantes.

1) Aprovechar la compartida producción de vehículos con nuestro socio EEUU para crear un mercado de autos seminuevos (usados) importados legalmente a México.

2) La reducción del precio de los autos nuevos, abrogando el ISAN e incrementando su deducibilidad.

3) Reducir la depreciación acelerada de vehículos (que sólo beneficia a los concesionarios de marcas) poniendo énfasis en la tecnología híbrida y eléctrica.

4) Controlar las emisiones de gases producidos por vehículos automotores mediante la verificación vehicular, (yo agregaría que fuera gratuita).

NOMAS POR JODER:

Gustavo de Hoyos Walther se proclamó líder nazional anti-Morena y anunció que buscaría encabezar al PRI/PAN/PRD con miras a la elección presidencial de 2024.
Andrés Manuel López Obrador le respondió calificandolo “ternurita”. El abogado patronal a través de Twitter le contestó: “#HayTiro”. Con eso, Don Gustavo ya se siente presidenciable.